Adolfo el Chismoso

El mas grande de los males que los pastores movimientanos descubren en sus adeptos es el chisme y la facilidad para inventar calumnias, pocos saben que un grupo humano es el fiel reflejo de sus líderes. Y si de chismes se trata Adolfo Goncalvez Ruz es de las grandes ligas, todos los allegados a él saben que es muy dado a prestar oído a los detractores de sus subalternos inmediatos, todos saben que ante este siervo gana favores el que llegue primero a contar su versión de los hechos. Adolfón siempre favoreció la existencia de radio bemba, Ruí Deza Bucanera se quejó muchas veces de este terrible mal del siervo, quien "mantiene una línea directa" con las arpías de la oficina de 26 de Junio decía y "así no se puede trabajar", debería retirarse a Carlota decía.
Una reunión típica en el consistorio empezaba siempre tarde, después de una breve lectura bíblica y una oración de cinco minutos, luego Adolfo te ponía al día con sus últimas victorias sobre los dirigentes mundiales gracias a su raposa habilidad, que si las indecisiones de Lautaro Mastines que el valientemente resolvía, que si los "mundanos" hijos del presidente, que si la esposa de éste vestía muy apretado, que si este Patrón de Medellín se había comprado una finca de un millón y medio de dólares (dato que se oyó de Medardo Neida), que si Monje Tábarez seguía "enamorado" de Lemuel Rondón, que si la gente se preguntaba porqué Bosé Goto andaba siempre solo y el porqué del problema de la esquizofrenia en la esposa, que si la iglesia del parque Lafabre era libertina, que si Galdos Querra "mundanalizó" la obra en USA, que si los colombianos copaban las esferas del poder en la 3M y bloqueaban a los misioneros que él quería colocar en las naciones, cómo en muchos casos colocaron hermanos que ni eran obreros hasta como supervisores con tal de ganarle la partida y así. Luego un informe de las victorias de los pocos obreros "de la escuela peruana" en el mundo. Sin sonrojarse "compartía" su preocupación por su familia, que si una nuera en la Florida parecía que "andaba" con un hombre mientras su consorte trabajaba en Lima, que si su hijo mayor salido de prisión seguía estafando, que si la separación de su otro hijo obedeció a las artes lésbicas. Después ventilaba secretos pastorales y confesiones privadas de algunos clérigos, estos relatos solo exponían las miserias humanas.
Este mismo espíritu se manifiesta en sus incondicionales y asociados dirigentes. Ruí Deza descubrió al "marido" de uno de los nietos de Adolfo y presentó el "hallazgo" del lesbianismo de una de las nietas. Medardo Neida traía noticias de las perversiones de Hildías Goncalvez en cada reunión y contaba las debilidades de la cúpula mundial por las pepitas de oro. Era un verdadero festín de los placeres de la lengua para ellos. Aquí por supuesto está la explicación de la afición por este deporte en muchos pastores y congregaciones, repitiendo esta carnalidad cada cual en su provincia.